La brecha digital que se hizo más evidente con la pandemia es más profunda en las zonas rurales y barrios populares de Argentina, generando aún más desigualdades sociales y económicas. Hoy, es prácticamente imposible pensar en estudiar, trabajar o incluso entretenerse y vincularse con otros sin el acceso a un dispositivo digital, a una buena conexión a internet o a tener los conocimientos que se requieren para su uso.
El Centro de Desarrollo Popular -CDP- en el barrio Las Tunas, ubicado al norte del Área metropolitana de la provincia de Buenos Aires identificó la falta de educación y alfabetización digital en el barrio de la mano de la dificultad que tienen las personas del barrio de acceder a una computadora. Además de pensar en la brecha digital se cuestionaron sobre la basura electrónica que generan los dispositivos cuando dejan de funcionar y se desechan sin ningún tipo de gestión ambiental adecuada.
Para darle solución a lo anterior, el Centro Popular de Desarrollo, desarrolló una iniciativa de formación de jóvenes y adolescentes del barrio en tecnología e informática, e implementó un proyecto productivo en el que reparando computadoras en desuso, se puedan vender a un precio accesible.
Con el apoyo del Fondo de Pequeños Proyectos de CREAS, la organización construyó un nuevo salón, más grande y cómodo en el que reciben a grupos más numerosos en las actividades educativas y productivas del centro. También compraron herramientas de trabajo con las que en las formaciones arreglaron varias computadoras de escritorio y una tablet. El apoyo para el mejoramiento de equipamiento e infraestructura para iniciativas desarrolladas por organizaciones comunitarias y diaconía de iglesias en los temas de nuevas economías, ecología integral y fortalecimiento organizacional, es prioritario para el Fondo de Pequeños Proyectos. De esta manera, aportamos al trabajo de dignificación de la vida en las comunidades y el cuidado de la Casa Común.
Del espacio nuevo se beneficiaron todas las personas que van al CDP, el grupo de niñez (6-12 años) y otros talleres cuentan con un espacio amplio en donde realizar sus actividades.
Reciclar e intercambiar
La iniciativa del Centro de Desarrollo Popular tiene tres objetivos:
- Reciclar y reducir la basura tecnológica: muchas veces se descartan dispositivos a los que, reparándolos, se les podría alargar la vida útil. Encontrar maneras de arreglar, usar aplicaciones menos pesadas, sacar componentes que puedan ser usados en otros dispositivos son maneras de generar menos contaminación electrónica.
En las actividades de formación el grupo aprendió sobre los componentes de las computadoras, junto con los profesores el grupo pudo distinguir, chequear y clasificar las partes que se pueden reciclar y cuáles desechar de las donaciones de dispositivos electrónicos que recibieron. - Intercambio de saberes: El Centro de Desarrollo Popular está formado por jóvenes estudiantes que forman parte de la organización desde adolescentes. Ahora son ellos quienes capacitan a adolescentes en los talleres de computación y esperan que quienes están formándose puedan hacer lo mismo con los próximos grupos.
En el transcurso de los talleres se consolidó la relación entre todo el grupo y los profes y todo el trabajo y aprendizaje se concretó cuando entregaron las computadoras reparadas a las familias del barrio.
“Tuvimos que trabajar el tema de costos y venta a precio popular para recuperar el costo.
Hubo múltiples aprendizajes no sólo en lo tecnológico sino en el servicio de la comunidad en la concientización de reciclar, reparar y no contaminar. Aprender la lógica del uso y tiro, múltiples aprendizajes en las diferentes áreas que se propusieron. Estamos muy contentos.
Cuando tuvieron el lugar físico el grupo se posicionó de otra manera y empezó a trabajar mejor”
Valeria Barraza, responsable del proyecto
Lazos comunitarios
Para llevar adelante el proyecto productivo, el Centro de Desarrollo Popular conoció la experiencia de la Organizacion Social Fray Luis Beltran de la Boca en Buenos Aires en el que ejecutan un proyecto similar. Además, presentaron el proyecto al Municipio de Tigre en busca de donaciones de computadoras en desuso de las oficinas de la municipalidad. Contaron también con el apoyo de la Red de Apoyo Escolar y Complementaria – RAE – para la visibilización y difusión del proyecto.
“Para implementar el proyecto se llevaron a cabo distintas articulaciones o colaboraciones que nos ayudaron a concretar no solo en mano de obra si no que también en materiales como donaciones de pintura, muebles de oficinas, placas de escritorios, computadoras en desusos, donaciones de teclados y monitores de modelos antiguos pero en perfecto estado para su uso”.
CDP
Uno de los grandes logros de este proyecto es la firma de un convenio con la Universidad Tecnológica Nacional en su sede de General Pacheco -norte del conurbano bonaerense – con el cual se articulan actividades educativas y de transmisión de conocimientos para con los participantes del proyecto productivo.
“Empezamos a hacer un vínculo con la Universidad Tecnológica Nacional y nos dijeron que tal vez nos pueden becar en algunos cursos cortos de extensión y motivar a los pibes a que es un lugar posible. Hicimos una visita a la universidad, que queda cerca de nuestro centro comunitario. Es lindo habitar esos espacios donde los pibes nunca se proyectaron, va a dar hermosos frutos”
Valeria Barraza
Promoción de la economía solidaria
Las computadoras reparadas y armadas en el taller del Centro de Desarrollo Productivo se venden a las familias del barrio a un precio popular. Así las familias pueden acceder a un dispositivo tecnológico y el proyecto se sostiene a largo plazo. En caso de que una familia no cuente con el dinero suficiente para pagar el aparato puede acceder a este a través del trueque, intercambiando su trabajo o conocimientos.
“A través de esta modalidad podemos fomentar el trabajo socio comunitario beneficiando a las familias con vulneración de derechos, por ejemplo si detectamos alguna vulneración de derecho a la vivienda (construcción de un baño, construcción de un contrapiso, revoque, etc.) El intercambio se realiza entre los propios vecinos. De esta manera reforzamos los lazos de la comunidad con el centro y entre los propios vecinos. Cuando las familias realizan trueques para la organización o la comunidad, desde CPD se garantiza los insumos para la continuidad del proyecto”.
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