Rock y Vida para el cuidado de la Creación

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Rock y vida, es una organización civil vinculada al Centro Cristiano Nueva Vida – CCNV – . Nació y está presente en Parque Patricios en la ciudad de Buenos Aires, y tiene diferentes áreas de trabajo: salud y centros de testeo, prevención de las adicciones y medio ambiente. A partir de la participación del CCNV en el encuentro sobre diaconía ecuménica organizado por CREAS en 2023, Rock y Vida nos ha abierto las puertas para mostrar su trabajo diaconal para fortalecer el desarrollo territorial y el cuidado del medio ambiente.

Conversamos con Francisco Juárez, coordinador de Ambiente, quien nos contó sobre el trabajo de la organización y su aporte en la búsqueda del cuidado de la Creación.

 

¿Por qué el CCNV decide tener una organización civil como Rock y Vida?

 

Como iglesia tener asociaciones civiles como esta es una forma de llegar a todas las personas; creemos el amor a los demás y lo mostramos y aplicamos. No se trata sólo de predicar sino de hacer y proponer diferentes formas de transformar la vida de la gente. Queremos llegar a personas a las que como iglesia no llegamos.
Por supuesto que todas las áreas de trabajo tienen que ver con el otro, con lo social, con la transformación, con dar vida, con asistir.
Convocamos a profesionales, nosotros somos una iglesia muy grande con 30.000 miembros, por lo cual conectamos con profesionales de todas las áreas, sumando personas que pertenecen a esta comunidad de la iglesia pero también a quienes no, por eso es maravilloso lo que es una Asociación Civil.
El área de la salud, por un lado, el ambiente y la salud están absolutamente ligados, porque es imposible poder tener salud sin un ambiente sano, realmente imposible, de hecho la Biblia lo habla y nos explica que cuando destruyamos lo que vamos a tener, vamos a tener lo que estamos teniendo ahora, un desequilibrio absoluto en la Creación.

¿Cuáles son las acciones que hace Rock y Vida para aportar al cuidado de la Creación en comunidad?

 

Lo primero es que nosotros venimos desde hace muchos años dando talleres sobre Uso racional y eficiente de la energía. Es un buen momento para hablar de eso porque se espera que los servicios suban mucho, además acá en Buenos Aires tenemos cortes de energía en verano e invierno por demanda energética. Este uso de la energía implica que mientras nosotros no tenemos, otros la puedan usar.

Entonces nosotros como iglesia, nosotros como asociación civil, nosotros como profesionales, damos estos encuentros abiertos a la comunidad para que vengan a entender y aprender.
La gente va a poder llevarse toda esa información, va a poder aprender por ejemplo:

  • Si yo tomo mate, como tomamos habitualmente en Argentina, y yo caliento este termo de agua con electricidad, el mate me sale 16 veces más caro que si lo caliento con gas.
  • Hay hornos eléctricos que consumen hasta 3.000 watts; eso son 400 lamparitas grandes prendidas al mismo tiempo.

Entonces informar sobre esto es tarea de las asociaciones civiles y organizaciones que consideren que las cosas pueden ser diferentes.

Los talleres que damos en este espacio después van rotando en los 25 lugares que tiene la iglesia en todo el Gran Buenos Aires.

Foto: Rock y Vida

Tienen además talleres con salida laboral sustentable, háblame sobre esos…

 

Todos los años tenemos diferentes talleres de salida laboral. Son 8 talleres anuales que se dan los lunes. Son libres y abiertos a la comunidad, con un bono de contribución muy bajo. La idea es que la gente lo valore y entienda que si queremos seguir teniendo espacios tan maravillosos, abiertos, como este, está bueno valorarlo. Aprendemos a reutilizar. El año pasado dimos cómo hacer riego con agua de lluvia. Además hemos tenido otros talleres prácticos:

  • Energía solar y construcción de paneles solares: con estos damos luz a este espacio en el que estamos.
  • Construcción de bolsas de dormir térmicas para personas en situación de calle: son fáciles y baratas de armar, pesan poco y son ignífugas. Hemos entregado centenares de bolsas cada año.
  • Construcción de ecocooler: se arman a partir de envases de plástico y sirven para reducir la temperatura interior de las casas. Cada quien se lleva el que arma y queda con los conocimientos de la fabricación.

La temática de los talleres va rotando cada año. La idea es aprender a reutilizar materiales y hacer productos con valor agregado. Con un kilo de madera puedo hacer algo simple, que no tiene casi valor, como escarbadientes… o se puede hacer un banco como el que hicimos acá entre tres talleres: herrería, carpintería y energía solar. Es un banco en el que se puede cargar el celular.
Hacer algo que tenga un valor agregado maravilloso y que aporte un extra a la hora de vender un producto. Entonces siempre todo lo que nosotros enseñamos va ahí en paralelo con páginas, con información, con todo lo que ellos pueden tomar de diseño, de técnica, de modernización, de herramientas, para que no quede simplemente en un tejido artesanal hogareño, sino que puedan volar y crear si quieren. También les damos herramientas para que puedan hacer difusión y comercializarlo si desean.

Ustedes reciben materiales y los separan, contame un poco de ese proceso

 

Tenemos ocho productos que recibimos. Los separamos y con algunos de ellos empezamos a hacer algunos productos. Hacemos bolsas que son 65% de material reciclado y estamos en proceso de que ese porcentaje aumente.

La idea es hacer cosas que necesitamos en el día a día, como las bolsas de basura que igual vas a comprar en otro lado pero si compras estas, además estás apoyando una causa preciosa. Nosotros hacemos la investigación y tenemos convenios con empresas que las fabrican, nosotros entregamos los materiales y ellos producen. También tenemos convenios con empresas que nos compran las bolsas.

Muchas familias de la comunidad del barrio y la iglesia traen los materiales, y así otra persona los ve y también traen, se va aumentado la cantidad. La última estadística que hicimos nos dio que superamos las 30.000 toneladas de material reciclable pero lo más importante para nosotros es la cantidad de familias y personas dispuestas a colaborar que hay detrás de ese logro.

Hablaste de investigación ¿Cómo la hacen?

 

Tenemos el laboratorio I + D en el que investigamos y desarrollamos todo lo que he contado. Participan profesionales de muchas ramas que vienen, hacen, probamos, nos frustramos, hasta que llegamos a un producto final, con materiales reciclados y de bajo costo, como la bolsa para dormir o una maceta de autorriego hecha a partir de residuos de choclo, que la pensamos para poder sembrar en espacios reducidos.

Tenemos otro proyecto que se llama Vivienda precio justo, en el que buscamos reutilizar papel y concreto para crear viviendas.

Los profesionales interactúan en todo este desarrollo pero también actúan en los talleres, en las campañas que hacemos en facultades, plazas, shoppings y otros lugares en los que hacemos difusión de la organización. También vendemos los productos “Cero Huella” que hacemos como la maceta de autorriego, vasos térmicos, termos, bolsas, cuadernos y lápices plantables.

Desde CREAS, felicitamos a Rock y Vida y al Centro Cristiano Nueva Vida por este testimonio práctico a favor de la vida plena, la dignidad de las personas y el cuidado de la Casa Común. Continuaremos compartiendo estas experiencias para fortalecer el intercambio de saberes y la articulación del trabajo diaconal de las iglesias como aporte al desarrollo sostenible local.

 

Productos Cero Huella

 

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